La batalla contra el hambre pasa por la reforma agraria

Esta nota la escribí para la agencia IPS mientras cubría el Foro Social Mundial de Caracas en el 2006. Salió publicada en el diario TerraViva. Acá el texto completo.
***

Debate sobre la reforma agraria
La tierra, la agricultura y el hambre

Desde que existe la propiedad privada, existen ganas de hacer que la tierra regrese a las manos de quienes la trabajan. Pero a veces, cuando esto ocurre, tampoco funciona. Se ha probado de todo, y la discusión continúa. Expertos y campesinos, funcionarios y propietarios. Los 850 millones de hambrientos del mundo están esperando.

Tal como la tierra que se rotura una y otra vez antes de cada siembra para cada esperada cosecha; el debate sobre la alimentación y el hambre, la reforma agraria y la superación de la pobreza aparece en cada esquina y el sexto FSM no podía ser excepción.

En una sala de Parque Central atestada de representas de los movimientos campesinos de Latinoamérica y de periodistas discutieron Paolo Droppo de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), Fausto Torres, de Vía Campesina; Miguel Rosseto, ministro de desarrollo Rural de Brasil; Oscar Torres de Plataforma Rural por la tierra de Chile, y Alberto Broch de la CONTAG de Brasil, entre otros.



Para Droppo, el hambre no es un problema geográfico sino estructural, y es necesaria la reforma agraria para poder erradicarla. "Dentro de la FAO no tenemos una visión compartida del tema de la reforma agraria, de allí la importancia de la próxima conferencia que se realizará en Brasil en cinco semanas", comentó.

En esa conferencia de la FAO, con una participación de entidades no gubernamentales, "vamos a retomar el tema de la reforma agraria, pero ahora desde una visión más amplia que englobe los aspectos de la tierra, el territorio, los espacios, el acceso, la soberanía alimentaria, las semillas, para lograr a corto plazo un mejoramiento del nivel de vida en el campo", expresó Fausto Torres.

Las expectativas de la FAO para esa reunión se resumen en tres puntos: (1) elaborar un portafolio de posibles iniciativas conjuntas; (2) elaborar un archivo electrónico sobre los sistemas de tenencia de tierra y (3) crear un observatorio de especialistas internacionales en la materia.

Rosseto planteó la necesidad de retomar el proyecto de la reforma agraria mundial y colocar el tema en la agenda política de los entes internacionales. "Tenemos que trabajar para fortalecer los organismos multilaterales, pero estos espacios requieren profundas reformas internas con el objetivo de democratizar la toma de decisiones", dijo Rosseto.

Broch expuso que la lucha contra el hambre no tendrá éxito si no se debate sobre la reforma agraria. "Ha habido avances, pero no estamos contentos, necesitamos avanzar más. La violencia en el campo es atroz. Todos los meses son asesinados dirigentes campesinos a manos de latifundistas. Eso no lo podemos permitir".

Colombia: pocos avances
En algunos países de América Latina la reforma agraria no ha avanzado de manera efectiva. En Colombia, por ejemplo, el conflicto de violencia interno ha impactado en la vida en el campo. María Plata, de la organización no gubernamental Remte, considera que la situación rural ha desmejorado en los últimos años con la administración de Álvaro Uribe.

"Con este gobierno de derecha ha habido un retroceso enorme y criminal en el campo porque los comandantes paramilitares han desplazado, a punta de motosierras, a los campesinos, indígenas y afrocolombianos de las tierras más productivas", explicó Plata.

Aseveró que "lo que ha cambiado en este gobierno es que con la Ley de Justicia y Paz que garantiza a impunidad, se está instaurando una nueva generación de latifundistas, esta vez vinculados con las autodefensas y los narcotraficantes".

Plata insistió en que "nunca ha habido reformas agrarias en Colombia, sino remedos, con la ley 200 de 1936 y la ley 135 de 1961, pero son simulacros de reforma porque no se acompañaron de programas de apoyo a la agricultura rural y doméstica".

Brasil: persiste malestar
En Brasil el Movimiento de los Sin Tierra y otras agrupaciones campesinas evidencian su malestar frente a las políticas implementadas por el gobierno de Lula.

Altacir Bunde del Movimiento de los Pequeños Agricultores de Brasil, expresó su descontento con los resultados de la reforma agraria durante el gobierno del Partido de los Trabajadores. "Creemos que la reforma agraria está parada. Teníamos muchas expectativas, pero no hemos avanzado. Sentimos que el presidente Lula ha apoyado a las transnacionales y a los grandes latifundistas y se ha olvidado de nosotros, los campesinos y los sin tierra".

Criticó más: "No se ha avanzado porque el gobierno mantiene una política económica neoliberal como en los años de Fernando Henrique Cardoso (predecesor de Lula). Creo que ellos tienen que escoger entre apoyar a los campesinos o a los latifundistas, pero no es posible apoyar ambos", se quejó Bunde.

Y el debate continuó. Y la criba de ideas sobre la mejor reforma agraria posible.

Comentarios